Tulio Loza recuerda la canción que cantaba para promocionar el Diario Ojo en la pantalla grande

A sus 32 años ya era Nemesio Chupaca y una estrella de la televisión en blanco y negro, cuando en los primeros días de marzo de 1968 lo llamaron para promocionar el lanzamiento de un diario que iba a revolucionar el ambiente periodístico peruano. 

“No lo pensé mucho, algo me decía que  sería un diario que se quedaría para siempre en mi corazón”, recuerda Tulio medio siglo después. Gracias a la magia de YouTube regresan esas imágenes desde el pasado, con muchos kilos menos y la divina juventud en un comercial al estilo de la nueva ola. 

“OJO, OJO, es un diario popular de la mañana, lo entretiene, lo defiende y solo cuesta un sol”, canta la chica de moda de esos gloriosos años, Gladys Arista. “OJO, OJO, es un diario popular, ágil, ameno, fuerte, peleador, sale caliente, el 14 en la mañana y solo cuesta un sol”, recomienda Loza a los televidente. Pero la campaña no terminó allí, pues Tulio continuó con los comerciales para OJO y su discurso en el spot final no pudo ser más premonitorio. “OJO llegó, triunfó, y se vendió como cancha”. Santas palabras de Nemesio Chupaca.

OJO cumple 50 años, algunos más de carrera tiene “El cholo de acero inoxidable”, una trayectoria impecable que el diario de la familia siempre reseñó especialmente los enfrentamientos de Camotillo el Tinterillo con el poder de turno.

“A mí no me gustó nunca una forma cómoda de hacer humor. Si hay otros que lo hacen no es mi problema, son unos cobardes de porquería. Para mí, un humorista, un artista, si quiere arreglar su país, debe decir desde su tribuna las cositas feas que hay en el país”.

Camotillo el Tinterillo era el hombre. ¿Quién lo creó?

Entre Polo Campos y yo. Yo ya venía de ser el chico de los discursitos en mi tierra Abancay. Cuando llegaba un senador o un diputado, un alcalde que no tenía las agallas para decirles las cosas me daba plata para mi ternito y yo le daba la bienvenida a los políticos, pero les cantaba todas sus verdades por mentirosos.

¿Y cómo llega Polo Campos?

Yo busqué primero a Sofocleto para que me escriba los libretos para Camotillo, pero los que me hizo fueron para un público muy intelectual, de clase media para arriba. Fue allí que entró Polo, quien captaba muy bien el mensaje del pueblo y eso era lo que yo quería. Hicimos una buena dupla. Él me daba el libreto y yo le ponía mis cosas.

“Camotillo” le generó enemigos, odios, deportaciones y amenazas contra su vida. De todo como en botica, solo por no casarse con los gobiernos de turno. “Nunca le he tenido miedo al poder, uno muere cuando Dios ordena, carajo”, dice Tulio a sus 82, fuerte como un roble, con ganas de comerse al mundo y con el uniforme de Camotillo, listo para el regreso.     

OJO CON ESTO 

HAY MÁS...

TAGS RELACIONADOS