Vladimir de los Santos quedó a disposición de la comisaría de Santa Isabel en calidad de detenido por el presunto delito de hurto.
Vladimir de los Santos quedó a disposición de la comisaría de Santa Isabel en calidad de detenido por el presunto delito de hurto.

De rodillas, un delincuente, que aseguró que era la primera vez que robaba, pidió perdón a la para que no lo manden a prisión. “Quiero que me perdone de todo corazón maestro. No lo voy a volver hacer. Estoy arrepentido”, fue el ruego del hampón, presuntamente novato, tras ser capturado por agentes del luego de que arrebató un celular a un pasajero de un bus en .

El detenido se arrodilló para pedir al policía que lo intervino para que no termine en prisión.
El detenido se arrodilló para pedir al policía que lo intervino para que no termine en prisión.

La intervención se produjo en la avenida Lima 103, en la urbanización San Felipe. Los custodios, que hacían vigilancia en el paradero del lugar, se percataron que un sujeto, que vestía polo color rojo y pantalón de buzo, subía a los buses de transporte público por la puerta posterior y solo segundos después bajaba. Esta acción lo repitió más de 10 veces por lo que sospecharon que se trataba de un delincuente y aguardaron el momento para atraparlo en delito flagrante.

Y así sucedió. El hampón robó un celular al pasajero y emprendió su fuga y detrás de él los agentes del Grupo Terna del Escuadrón Verde que lo redujeron y lo capturaron. Emeterio Escarza (61), le dijo a los policías que ese sujeto le acaba de robar su celular.

El delincuente fue identificado como Vladimir de los Santos Becerra (20). Este le dijo a los policías que era la primera vez que robaba. “La necesidad me llevó a hacer esto. Es la primera vez. Estoy arrepentido jefe”, manifestó.

“Dudando, dudando, así estaba. Temblando. Hasta que le arrebaté el celular al señor y bajé. Nunca lo he hecho. Hoy tenía que pagar mi cuarto. Tengo mi familia. Todo por mi mala cabeza. Ya sé el miedo que se siente cuando uno es detenido”, les dijo a los custodios en la comisaría de Santa Isabel cuando estos formulaban el parte de la intervención. “No tengo ninguna denuncia, ninguna intervención, estoy limpio, busque”, sostuvo. En ese momento se arrodilló y pidió perdón por su mala acción.