FOTO: 24 HORAS PANAMERICANA TV
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, el joven de 25 años que confesó haber asesinado a su amigo taxista Gerber Luis Coz Vara, de 36, habría actuado por celos enfermizos, según la hipótesis de los agentes de la Policía Nacional que investigan el caso.

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El noticiero “24 horas” de Panamericana Televisión dio cuenta que, según las autoridades, el móvil serían los celos enfermizos en medio de una supuesta relación amorosa entre la víctima y su verdugo.

En las próximas horas, cuando sea nuevamente interrogado, el joven estudiante de medicina veterinaria tendrá que aceptar o rechazar la hipótesis de un crimen pasional.

diario OJO | informe 24 horas caso taxista
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Como se sabe, según su propia confesión, Sánchez Suárez , mientras que la cabeza la escondió en el patio de su casa, en San Juan de Miraflores.

Según informó diario Trome, una semana antes, el asesino confeso descubrió en el celular de la víctima una foto de él con una mujer.

¿Cómo conoció a su víctima?

El asesino confeso conoció a su víctima desde hace un año, pues el taxista le hacía frecuentemente el servicio de taxi aplicativo.

Incluso, un día antes de su cumpleaños, el taxista Gerber Luis Coz Vara informa a su pareja que iba a encontrarse con el veterinario.

“Habíamos quedado que para el 15 de setiembre lo iba a pasar con nosotros y sus hijo, lo cual nunca llegó”, había comentado Andrea Ramírez Rodríguez, esposa del hombre de 36 años.

La macabra historia del asesinato a taxista

El 14 de septiembre se contactó por celular con Coz y lo invitó a su casa para celebrar por adelantado el cumpleaños de este último, quien llegó hasta la vivienda ubicada en el jirón Enrique Oppenheimer 980, donde bebieron licor.

Giancarlo Paolo Sánchez Suarez (25), detenido cuando manejaba la camioneta robada del taxista Gerber Luis Coz Vara (36), confesó que fue él quien descuartizó al trabajador.

Horas después sostuvieron una discusión, pelearon y terminó matando al taxista. En un vaso colocó dos somníferos y más tarde le aplicó la inyección para caballos, según reveló a los detectives de la División de Investigación de Homicidios de Dirincri.

“Lo maté. Lo descuarticé y me paseé tres días con los restos en la camioneta hasta que los arrojé en Cieneguilla. La cabeza la metí en una mochila y luego la dejé dentro de un balde. Le eché cemento y la escondí en el patio de mi casa”, habría confesado el joven estudiante de veterinaria, al verse acorralado por las evidencias encontradas por los detectives de la División de Investigación de Homicidios de Dirincri, al mando del coronel PNP Víctor Revoredo.

Tras cometer el crimen permaneció con el cadáver en su casa y dos días después empezó a descomponerse, por lo que decidió descuartizarlo para deshacerse de la prueba del delito.

Para cercenar el cadáver utilizó un cuchillo y un cincel. Colocó los restos en bolsas, los subió a la camioneta RAV 4x4, de placa AEW-259, de propiedad de la víctima, y los tuvo ahí casi un día paseándolas por los distritos de Lima Sur y Este buscando el lugar para abandonarlos y es así que la madrugada del 18 de setiembre los dejó en tres puntos en Cieneguilla, informó la fuente policial.

¿Quién era el taxista descuartizado en Cieneguilla?

Gerber Luis Coz Vara, de 36 años, era un joven taxista, padre de cinco niños. Sus familiares, que llegaron de Huánuco, retiraron los restos de la Morgue Central de Lima, y lo trasladaron a su tierra natal para darle cristiana sepultura.

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