La asesinan y embolsan

Cadáver dentro de bolsa y atado apareció debajo de la cama del celoso.
Una joven, quien había concluido sus estudios de secretariado y trabajaba como cobradora en un ómnibus de transporte público para poder solventar la obtención de su título, fue asesinada a golpes y estrangulada con una cuerda de cortina, presuntamente por su enamorado, en San Juan de Lurigancho.
El cadáver de Erika Manuela Sánchez Hamachi (21), que yacía embolsado y asegurado con cinta de embalaje, fue hallado debajo de una cama en un cuarto del tercer piso del inmueble de la manzana C-7 lote 70 de la urbanización Mariscal Cáceres.
Según primeros informes de los agentes de la Divincri-San Juan de Lurigancho, la responsabilidad de la muerte de la muchacha recaería en el taxista Frank Ramírez Rodríguez (24), quien hace un mes alquiló la habitación en la casa de propiedad del electricista Raymundo Alhuay Huamán.
Trascendió que el hombre del volante habría descubierto la infidelidad de su pareja con el chofer de una cúster de la línea P y, tras embriagarla con el licor Clímax, la atacó a golpes y estranguló sin piedad para después escapar. El asesino habría pretendido deshacerse del cadáver al embolsarlo.