SJL: Alumnos encuentran dos cuerpos carbonizados en descampado
SJL: Alumnos encuentran dos cuerpos carbonizados en descampado

“¡Es una pierna!”, “¡es una pierna!”, gritaban a viva voz profesores y alumnos del colegio parroquial Nuestra Señora de la Resurrección de Jicamarca, en , luego de observar de cerca el pedazo de carne que había traído consigo un perro de la zona.

“Los niños estaban ingresando en el colegio cuando nos dimos cuenta que uno de los perros estaba comiendo algo grande. Uno de los niños se acercó al perro para tratar de quitárselo, pero la mascota no se dejaba quitar”, contó María Cotaquispe, profesora de Nuestra Señora de la Resurrección de San Juan de Lurigancho.

“Poco después, el perro dejó la carne y nos acercamos a ver. Pensamos que se trataba de la pata de una vaca, pero vimos que era una pierna humana y que había dedos desgranados”, agregó la mujer.

Tras superar la impresión, la docente procedió, alrededor de las 8 a.m., a dar aviso a la comisaría de Jicamarca, en San Juan de Lurigancho. A los pocos minutos la noticia se propagó entre los vecinos. Los padres de los niños acudieron asustados al colegio para llevarse a los estudiantes a sus casas, mientras ellos lloraban desconsoladamente.

MUJERES QUEMADAS. Los efectivos de la comisaría llegaron al lugar para constatar la alerta y se percataron que en un descampado, ubicado cerca del colegio, había restos quemados. Se trataba de dos cuerpos humanos, pertenecientes a dos mujeres, según información policial. En un primer momento se deslizó la hipótesis de que se trataría de una pareja, hombre y mujer, debido a la complexión y estatura. Una de las evidencias que se logró encontrar en el lugar fue un anillo.

Las arrojaron. Según los primeros reportes de la Policía, las víctimas fueron asesinadas momentos antes de ser quemadas. Gracias al testimonio de algunos vecinos, se cree que los autores del hecho llegaron al descampado de Villa El Sol, en el Anexo 22, San Juan de Lurigancho, para abandonarlos allí y prenderles fuego con kerosene o gasolina, simulando que se trataba de basura.

“Vimos que un station wagon apareció con dos personas a bordo por el descampado la noche del jueves y luego uno de ellos salió con dos bolsas negras”, dijo una lugareña. “Después prendieron el fuego y se fueron”, remarcó la fuente.

ATERRADOR. Los serenos de Jicamarca,San Juan de Lurigancho, junto a los agentes de la comisaría fueron los primeros en llegar al lugar y, con el fin de conservar las evidencias, acordonaron la zona.

Más tarde, se hicieron presentes los efectivos de la División de San Juan de Lurigancho y Peritos de Criminalística, quienes durante varios minutos recogieron evidencias ante las miradas de decenas de curiosos. Las primeras diligencias dan cuenta que los cuerpos ya sin vida habrían sido carbonizados desde la cabeza hasta los pies, con el fin de que no sean reconocidos por sus familiares: “Las cabezas estaban cubiertas con un saco de tela y las manos estaban maniatadas”, reveló un efectivo policial.

Los cuerpos de las dos mujeres fueron trasladados a la Morgue Central de Lima para la necropsia de ley. Hasta el cierre de esta nota, la identidad de las víctimas no se ha podido confirmar, ya que no se encontró documentos de identidad.

POSIBLE FEMINICIDIO. Si bien el móvil de este doble asesinato es materia de investigación, la Policía presume que se trataría de un feminicidio. No obstante, tampoco se descarta que guarde relación con el tráfico de terrenos, debido a que en la zona abundan personas dedicadas a este delito: “Los traficantes de terrenos han hecho esto (la muerte de las mujeres) para atemorizar a los vecinos”, dijo uno de las pobladores del lugar.

TIERRA DE NADIE. Los vecinos del Anexo 22, en Jicamarca, San Juan de Lurigancho, alzaron su voz de protesta tras hacerse público el trágico hecho de sangre: “Los robos, violaciones y tráficos de terrenos son comunes en esta zona, debido a que no hay alumbrado público y el patrullaje es prácticamente nulo”, dijeron.

“Delincuentes a bordo de motocicletas nos roban, aprovechando que no hay luz. Pedimos mayor patrullaje a la Policía. Esto es tierra de nadie”, manifestó un vecino.

Las investigaciones están a cargo de la Divincri 1 de San Juan de Lurigancho, dependencia que ha recogido los testimonios de los vecinos que habrían visto a los asesinos. Por lo pronto, se informó que se están realizando operativos para dar con los crueles asesinos.

MIRA ESTO