En una carta dirigida a la fiscal de la Nación Zoraida Ávalos, el abogado de la condenada por terrorismo Elena Iparraguirre, le informa que ha presentado una denuncia penal “contra los que resulten responsables del presunto delito de asesinato”, cometido contra su esposo Abimael Guzmán. En la misiva indica que adjunta la denuncia manuscrita de su patrocinada con fecha 11 de setiembre.
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Además, el letrado Sebastián Chávez Sifuentes solicita que su patrocinada pueda realizar el reconocimiento del cadáver y este sea entregado a quien ella ha designado ante la Tercera Fiscalía Provincial del Callao “para darle una sepultura digna conforme a sus creencias”.
El pasado 15 de setiembre la fiscalía denegó el pedido de la terrorista Iparraguirre para que se le entregue el cuerpo de su esposo, cabecilla de Sendero Luminoso. El fiscal Vladimir Farfán Kehuarucho “ponderó el orden público e interés social” en su resolución.
En breve diálogo con este Diario el abogado de Iparraguirre indicó que en su momento apeló dicha decisión de la fiscalía. “Eso todavía no esta decidido”, dijo.
Chávez Sifuentes también solicita en su carta la participación de peritos de parte en las pericias de ley, que “oportunamente designaremos, a fin de determinar las causas de su muerte”.
Finalmente pide a la fiscal de la Nación que se constituya en el penal Anexo de Mujeres de Chorrillos, donde se encuentra recluida Iparraguirre, a fin de que esta “se ratifique personalmente de la denuncia en mención”.
Sobre por qué presentó recién ayer la denuncia, Chávez Sifuentes respondió: “Hemos tratado de que esa denuncia inicial la pueda ampliar la señora (Iparraguirre) en los términos que ella considera, pero como no es posible que nos haga llegar la denuncia ampliada, la hemos tenido que plantear tal como estuvo escrita”.
El abogado también niega que con esta denuncia se busque dilatar la cremación dispuesta por ley. Al respecto, dijo: “No (se busca eso), esa denuncia no tiene nada que ver con el tema de la ley porque la carta (de Iparraguirre) ya estaba proyectada desde el siguiente día de su muerte”.
“Si la fiscalía lo crema o no lo crema es (un tema) de la fiscalía y del gobierno que se ha metido en un tema que no le compete”, agregó.
El cadáver del genocida terrorista permanece en la Morgue Central del Callao, donde se le practicó la necropsia de ley, según la cual falleció de neumonía, así como exámenes antropológicos, de odontología forense, biología y de ADN.
Sus restos serán cremados en virtud a la nueva ley aprobada por el Congreso de la República y promulgada por el Ejecutivo, que permite la incineración de terroristas fallecidos en prisión.
Hasta el momento las autoridades no se han pronunciado cuándo y dónde se realizará la incineración respectiva.