Juan Noé Ataucusi, hermano de Ezequiel Jonás Ataucusi, actual presidente del Frente Popular Agrícola FIA del Perú (Frepap), acusó a la dirigencia del partido político de haber realizado elecciones internas irregulares para elegir la lista que participó en el proceso extraordinario que se llevó a cabo este 26 de enero.
Además, Juan Noé Ataucusi denunció que hace años se vienen registrando malos manejos dentro de la organización.
“Las elecciones de candidatos no han sido por previa asamblea. Entre gallos y media noche los han nombrado y han hecho aparecer a los candidato; pero para trabajar sí (dicen) ‘hermanos, hay que apoyar la campaña’. Eso es tiranía”, señaló Juan Ataucusi en declaraciones a Latina.
Las más recientes cifras de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) al 99% de las actas procesadas colocan al Frepap como la segunda agrupación política con más votos (8,27%) solo por detrás de Acción Popular (10,31%).
Pese a estos resultados, Juan Ataucusi insistió en que los virtuales parlamentarios elegidos del Frepap son parte de un grupo de “corruptos” y “fanáticos” que siguen a su hermano.
“Mi hermano Ezequiel Jonás premia a los corruptos, a los violentos y ahí está inclusive su desbalance patrimonial. Esto lo dejo al ejercicio de las autoridades y la ley”, indicó el hermano del dirigente partidario, en referencia a las denuncias por violencia familiar contra uno de los virtuales parlamentarios del Frepap, Wilmer Cayllahua.
Sin rendición de cuentas
Juan Noé dijo que la última reunión que sostuvo con su hermano fue en febrero del 2017, cuando trató de convencer a todos los hijos de su líder histórico, Ezequiel Ataucusi, para que firmen un documento en el cual lo reconocían como “dios” e “hijo del hombre”.
“La institución ha sido tomada por Ezequiel Jonás y su cúpula y hasta hoy la manejan. Bíblicamente (lo que nos pidió) no está aceptado. Son hechos antibíblicos que están ocurriendo dentro de la institución”, señaló.
Juan Ataucusi acusó a las autoridades dentro del Frepap de no dar cuentas del dinero que reciben como ingresos por concepto de diezmos, venta de comida y de la indumentaria que utilizan. Sobre los aportes de los simpatizantes, incluso señaló que antes eran voluntarios y ahora la dirigencia los exige en cada evento.
“Si uno va a Cieneguilla para un reposo general o una solemnidad de la causa, alguien pasa con una bolsa exigiendo el aporte [...] Tenemos comedores en cada iglesia. La de Cieneguilla produce 100 mil soles mensuales y anualmente 1,2 millones de soles y nunca han rendido un balance”, acusó.