Kenji Fujimori
Kenji Fujimori

quien se encontraba en calidad de legislador suspendido cuando se disolvió el Parlamento, aseguró que la mayoría del Congreso “politizó” la elección de los integrantes del Tribunal Constitucional (TC).

Además calificó esta acción como “la última de una larga lista de despropósitos en este quinquenio”.

A través de un pronunciamiento compartido a través de sus redes sociales, el menor de los Fujimori Higuchi indicó que no retornará al partido político Fuerza Popular y dijo creer que este partido comenzó con “la agresión a la democracia” que terminó con la disolución del Congreso.

La carta de Kenji Fujimori

El 30 de setiembre el presidente Martín Vizcarra tomó la decisión política de disolver el Congreso que horas antes elegía a un miembro del Tribunal Constitucional, el que bastaba para inclinar el balance del Tribunal hacia una mayoría distinta.

Lo eligió de entre una lista de candidatos designados por invitación y no por concurso. La mayoría parlamentaria no ha explicado hasta hoy la motivación de esta premura, que pareció relacionada con la urgencia de blindajes en el caso Odebrecht. Al proceder de esta manera apresurada, en el mismo instante cruzó una delgada línea roja que jamás debió traspasar: politizó la elección del Tribunal.

Esta decisión fue la última de una larga lista de despropósitos en este quinquenio. Su acto imprudente fue el pretexto para disolver el Congreso. Pero la agresión a la democracia comenzó mucho antes con la decisión política de Fuerza Popular y sus aliados de insistir en la vacancia de la Presidencia de la República. Con ello abrió la Caja de Pandora de todos los males que han atormentado al Perú desde entonces.

Dejarse arrinconar en una derecha reaccionaria y ponerse al servicio de cúpulas mercantilistas es lo que tristemente terminó haciendo esa mayoría: sirviendo a grupos de poder político y económico ajenos a las reformas que hace ya casi 30 años pusieron los cimientos del crecimiento del país.

Esa mayoría parlamentaria nos devolvió a la misma situación de hace 27 años atrás. Cayó ciegamente en la trampa de vacar la Presidencia sin sospechar siquiera que terminaría repitiendo el mismo guión de hace 27 años, solo que en el papel opuesto, el del partido político tradicional en la oposición obstruccionista.

Renuncié a Fuerza Popular en marzo del 2018 precisamente por las razones que expongo en esta carta, y no volveré.

La situación requiere hoy una solución a la medida del problema. Estoy a la expectativa de la aparición de nuevos rostros en la política peruana que asuman la decisión política de hacer cambios en el país.

Ha llegado el momento de poner en debate hoy nuevamente las reformas del capítulo político de la Constitución de 1993 para rediseñar el equilibrio entre el poder Legislativo y el Ejecutivo comenzando por el retorno a la bicameralidad.

Esta es la tarea del Congreso que los peruanos elegiremos en cuatro meses. Si el nuevo Congreso decide mañana reabrir la discusión sobre el modelo del capítulo económico de la Constitución, lee mal lo que el pueblo quiere. Escuchar al pueblo no es hacer siempre lo que dice. Y lo que el pueblo peruano quiere es igualdad de oportunidades en una economía libre y una democracia capaz de resolver los problemas.

Cabe destacar que Kenji Fujimori fue suspendido del disuelto Congreso en junio el 2018 junto con Bienvenido Ramírez y Guillermo Bocángel por presuntamente participar en una compra de votos a favor del expresidente Kuczynski para evitar el segundo proceso de vacancia en su contra.