Aunque a muchos les ha costado adaptarse, lo cierto es que llevar tapabocas es ahora la principal herramienta para evitar el contagio por . Al respecto, Dawn Davis, dermatóloga de Mayo Clinic, brinda los siguientes consejos para cuidar la piel ante su constante uso.

De acuerdo a la especialista, para evitar posibles moretones en la piel o el enrojecimiento de la misma, es necesario que la mascarilla no esté apretada, pero tampoco muy suelta.

Por el contrario, debe encontrarse firme y bien posicionada sobre su nariz y barbilla. Si no se siente cómodo, lo mejor será reemplazar las tiras elásticas por unas que se adapten a la forma de su rostro.

Del mismo modo, otra excelente opción es uso del óxido de zinc. “Tiene propiedades antiinflamatorias muy buenas. Se puede aplicar una capa delgada sobre el puente nasal, detrás de las orejas o debajo de la barbilla, en lugares donde el tapabocas tenga contacto con la piel”, recomienda.

Piel sensible

En este caso, lave bien su cara y aplique una loción o crema hidratante hipoalergénica antes de usar la mascarilla. De esta forma, se creará una capa de protección entre su rostro y el tapabocas.

“Remoje un paño en vinagre y colóquelo sobre el rostro durante unos 15 minutos en las zonas irritadas”, aconseja también como segunda alternativa. Repita este proceso, de ser posible, dos o tres veces al día.

Acné y rosácea

Por otro lado, si usted es de las personas que suda mucho y es propensa al brote de acné, lo ideal es lavarse el rostro con agua y jabón dos veces al día. Si observa sarpullido, consulte inmediatamente con su médico.

Además, no olvide lavar los tapabocas de algodón o tela cada cierto tiempo, con mucho cuidado para no dañar ni alterar su eficacia. Si nota alguna rasgadura o agujero, no lo piense más y deséchelo.