Una persona que sufre disfagia no puede comer alimentos sólidos, secos, pegajosos o que desprenden líquido al masticarlos  (Foto: Pixabay)
Una persona que sufre disfagia no puede comer alimentos sólidos, secos, pegajosos o que desprenden líquido al masticarlos (Foto: Pixabay)

La es la condición médica que causa dificultad o imposibilidad absoluta al momento de tragar alimentos sólidos y líquidos. Cuando existe este problema de salud, el proceso deglutorio se vuelve muy difícil y complicado, pudiendo inclusive obligar a pacientes graves a buscar vías alternativas para mantener una nutrición básica.

Durante este proceso se produce una compleja secuencia de contracciones y relajaciones de la musculatura de la boca y garganta controladas de manera muy coordinada por un grupo de neuronas. Esto puede provocar una incoordinación en el movimiento del bolo alimenticio o un error en la dirección del bolo, el cual, en lugar de descender por el esófago, puede pasar a la vía respiratoria y causar complicaciones graves de salud.

La disfagia puede provocar desnutrición y deshidratación, además de preocupación por si el alimento se va hacia el pulmón, lo que podría producir una neumonía por aspiración.

¿QUÉ TIENE QUE COMER UNA PERSONA QUE SUFRE DISFAGIA?

Una persona que sufre disfagia no puede comer alimentos sólidos, secos, pegajosos o que desprenden líquido al masticarlos (como ocurre con determinadas frutas). Por eso hay que preparar las comidas de forma adecuada, pero sin olvidar que la dieta debe ser rica y variada.

La comida debe tener una consistencia suave y uniforme. Es mejor que sean alimentos de consistencia blanda y homogénea, como los purés, que sólidos, porque la persona se cansará menos al comer.

Las cosas muy líquidas pueden provocar accesos de tos. Para evitarlo se puede combinar líquido con sólido formando una pasta homogénea. Por ejemplo, galletas mezcladas con leche.

El paciente puede beber cualquier tipo de líquido, siempre y cuando se adapte su textura utilizando espesantes, como la gelatina de agua.

Se aconseja usar algún producto de farmacia para espesar, ya que la gelatina que se adquiere en el supermercado se convierte en líquido al contacto con la saliva.

PAUTAS PARA FACILITAR LA INGESTA A PERSONAS CON DISGAFIA

PERSONA DESPIERTA Y SIN DISTRACCIONES

Antes de comenzar a comer hay que asegurarse de que la persona está bien despierta y tranquila, porque en caso contrario puede atragantarse. Es preferible esperar unos minutos que llevarnos un susto innecesario.

También se recomienda que no existan distracciones (como la televisión o la radio). Así solo se concentrará en comer.

POSTURA CORRECTA

La postura es de vital importancia tanto para la persona que no puede tragar bien, como para quien se encarga de darle los alimentos.

En aquellos casos en los que la persona con disfagia pueda estar sentada, su espalda tiene que estar recta y la cabeza ligeramente inclinada hacia delante.

Si es una persona encamada se le incorporará lo máximo posible en la cama, con la espalda recta y la cabeza inclinada hacia delante.

En el momento en que ingiera, la barbilla debe estar lo más inclinada posible sobre el pecho, para proteger la vía respiratoria.

Quien da de comer tiene que estar sentado a la altura o por debajo de los ojos del dependiente para evitar que se atragante al alzar la cabeza para comer.

SIN PRISA PERO SIN PAUSA

La paciencia es una virtud y para dar de comer hay que desarrollarla a fondo. Si se da de comer a una persona con dificultades para tragar hay que tener tiempo suficiente, porque tardan más en alimentarse.

Sin embargo, no se deben emplear más de 30 minutos para que la persona que está comiendo no se canse.

Para lograr que ingiera lo necesario en el tiempo estimado se deben programar las comidas para aquellos momentos en los que el dependiente esté más descansado, porque la fatiga muscular y el cansancio aumentan el riesgo de aspiración.

VIDEO RECOMENDADO

10 alimentos que debes consumir para limpiar tu hígado

10 alimentos que debes consumir para limpiar tu hígado
El hígado es esencial para la secreción de la bilis y en el procesamiento de sustancias nocivas en la urea.

TAGS RELACIONADOS