Luego de culminada la tan esperada , es probable que los días posteriores se siga comiendo pavo en variedades de platillos. Además, también se continúa disfrutando de las condimentadas salsas y otros brebajes que sobraron de la Nochebuena. Con el pasar de los días, el estómago sufre las consecuencias de recibir más comida de la que realmente necesita, causando un gran malestar general que lo puede llevar hasta la sala de emergencias.

Sin embargo, sufrir de empacho es más común de lo que parece, especialmente durante estas fechas festivas. Si está pensando en acudir a un doctor o correr a la farmacia más cercana para aliviar las náuseas, diarrea, estreñimiento o acidez estomacal, le recomendamos primero probar con estos remedios caseros.

Tomar agua con limón y bicarbonato de sodio

Se ha considerado como el mejor remedio natural durante largos años, pues es bastante efectivo y económico. Lo que debe hacer es mezclar unas cuantas gotas de limón y una cucharadita de bicarbonato en un vaso con agua, y luego tomarlo en las mañanas. Después, mantenga una dieta ligera durante el día y beba abundante agua.

Comer un plátano maduro

Es perfecto para regular el sistema digestivo y regular los síntomas como la diarrea gracias a su gran aporte de potasio. Recuerde consumirlo en puré o hervido, pero jamás frito porque podría causar el efecto contrario.

Probar té de canela

Le ayudará a calmar los gases y la sensación de estar lleno sin haber comido nada ese día. Recuerde que el té de canela estimula la salivación y la secreción de jugos gástricos, al mismo tiempo que protege el estómago. Por eso, hierva unas cuantas ramitas de canela en agua y tómelo regularmente durante el día para obtener todos sus beneficios antiinflamatorios.

Ingerir vinagre de manzana

Debido a sus poderes antibióticos y a su propiedad anti acidez, es una buena alternativa para curar nuestro estado de indigestión. ¿Cómo tomarlo? Mezcle una cucharadita de vinagre de manzana en un vaso con agua tibia. Tome esta infusión 30 minutos antes de acostarse y 30 minutos después de levantarse.