Una enfermera puneña y una menor loretana han sido víctimas de un tipo de violencia en aumento: la sexual. En el Perú, al día, se han reportado 68 casos, promedio generado de las 4015 víctimas atendidas por el tan solo entre enero y febrero de este año.

De dicho total, 9 de cada 10 personas agredidas y que han solicitado ayuda en los Centros de Emergencia Mujer (CEM) son mujeres. Los adolescentes, sobre todo de sexo femenino, se han vuelto en el blanco principal de estos depravados, pues sus casos representan el 47 %.

También están en la mira los menores de 6 a 11 años y las mujeres de 18 a 25 años.

Asimismo, de acuerdo a la estadística del sector, 1704 sufrieron ; 338 actos contra el pudor, 69 hostigamiento sexual, 54 fueron víctimas de acoso sexual en espacios públicos y otras 7 son víctimas de trata con fines de explotación sexual.

Además, nueve regiones concentran el 72.9 % de casos de violencia sexual: Lima, Arequipa, Junín, Huánuco, La Libertad, San Martín, Ica, Áncash y Cusco.

Hay impunidad en el acceso a justicia

En un oficio enviado al premier Alberto Otárola, la Defensoría del Pueblo alertó al Gobierno que los servicios de atención a víctimas de violencia no se implementan en concordancia a los objetivos planteados.

Así, detalló que se ha paralizado la reestructuración de los servicios integrales del Programa Aurora y hay demora en la implementación de distritos judiciales especializados en violencia.

“Al día de hoy, las mujeres, en su diversidad, siguen enfrentando hechos que afectan derechos fundamentales como su vida, integridad y salud, que no son prevenidos ni atendidos de manera diligente, rápida e integral por las entidades llamadas a hacerlo. Más grave aún, las víctimas ven negado o limitado su derecho al acceso a la justicia, ya que estos nudos en la actuación estatal confluyen en la falta de sanción a los agresores y el reforzamiento de una cultura de impunidad”, resaltó.

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