Paul “Pen” Farthing y su equipo están trabajando hace días en La Operación Ark, que tiene como objetivo evacuar al personal del refugio junto con sus familias y a los 140 perros y 60 gatos que están con ellos.

Días después de la caída de la capital afgana a manos de los talibanes, Farthing anunció que no iba a dejar el país hasta que le aseguraran una vía de escape a su equipo y sus animales.

. El Ministro de Defensa Ben Wallace autorizó el aterrizaje del avión que habían conseguido los seguidores del activista por los animales.

Sin embargo, el camino hacia el aeropuerto no estuvo exento de problemas. No solo fueron demorados por controles talibanes en los que llegaron a dispararse tiros, sino que luego estuvieron más de 10 horas sin poder acercarse a la entrada del aeropuerto, corriendo el riesgo de que fallezcan varios de los animales.

Oficiales estadounidenses rechazaron despegue hacia Inglaterra

No obstante, Farthing y su comitiva lograron ingresar al aeropuerto sanos y salvos durante la tarde del jueves. Pero cuando todo parecía que estaba próximo a solucionarse y que iban a poder despegar hacia Inglaterra, los oficiales del ejército estadounidense rechazaron sus papeles y los obligaron a retirarse.

“Todo el equipo y los perros/gatos estaban a salvo a 300 metros dentro del perímetro del aeropuerto. Fuimos rechazados ya que @JoeBiden @POTUS había cambiado las reglas del papeleo sólo 2 horas antes. Pasamos por un infierno para llegar allí y nos rechazaron en el caos de esas devastadoras explosiones.

Ante la pregunta de una seguidora de porque no sirvieron los papeles que les había entregado el gobierno británico, Farthing contesto: “Los EE.UU. controlan el aeropuerto (internamente), por lo que se impusieron por sobre el papeleo británico que teníamos”.

El hecho es doblemente negativo para el grupo que busca escapar del terror talibán ya que no solo significó el fracaso momentáneo de su operación, sino porque esta era probablemente la última oportunidad que iban a tener de salir del país.

En las últimas horas el gobierno británico confirmó que había entrado en la última etapa de evacuación y que no se iba a llamar a más personas a que se acercaran al aeropuerto para ser evacuadas.