Ya son 21 los distritos de Lima y Callao declarados en estado de emergencia por la alta criminalidad, pero los asesinatos a sueldo, asaltos, extorsiones y otros delitos siguen en aumento.
Ayer el Gobierno declaró el estado de excepción por 60 días calendario en La Victoria (Lima) y en los distritos de Callao Cercado, Bellavista, Carmen de La Legua-Reynoso, La Perla, La Punta y Mi Perú de la Provincia Constitucional del Callao.
Durante este periodo, la Policía Nacional mantendrá el control del orden interno con apoyo de las Fuerzas Armadas.
Ate, Ancón, Carabayllo, Comas, Independencia, Los Olivos, Lurigancho - Chosica, Puente Piedra, Rímac, San Martín de Porres, San Juan de Lurigancho, Santa Rosa y Villa El Salvador, en Lima, y Ventanilla, en el Callao ya estaban en estado de emergencia.
Desde el emporio comercial de Gamarra, ubicado en La Victoria, los comerciantes saludaron la medida, más aún cuando en esta época del año reciben más compradores por las fiestas de Navidad y Año Nuevo.
El alcalde del referido distrito, Rubén Cano, tras un sobrevuelo en helicóptero, expresó su satisfacción por la medida y se mostró abierto a apoyar en el patrullaje. Edwards Infantes, alcalde de Carmen de La Legua-Reynoso, pidió más policías para su distrito.
En tanto, el jefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas (CCFFAA), Julio Castañeda, garantizó el número necesario de militares para patrullar las calles.
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“Gobierno vende humo”
El exministro del Interior de Ollanta Humala, Wilfredo Pedraza, afirmó que con la ampliación del estado de emergencia se pretende “vender humo a la ciudadanía” porque no tendrá mayor impacto en la lucha contra la delincuencia, pues solo es una respuesta política a un problema, que la presidenta Dina Boluarte no tiene idea de cómo combatir.
A pesar de los estados de emergencia no se han modificado los indicadores sobre el crimen, incluso la sensación de inseguridad ha ido en aumento, dijo el gobernador del Callao, Ciro Castillo-Rojo.