Ayer en la madrugada fueron capturados tres integrantes de la banda “Los Buitres de Evitamiento”, quienes se dedicaban a robar y secuestrar al paso, bajo la modalidad del falso colectivo.

Estos sujetos generaban zozobra a los pasajeros del sur de Lima, quienes los abordaban con la confianza de llegar de forma rápida y segura a sus destinos.

Su captura fue posible gracias a la denuncia de un efectivo policial, quien hizo la denuncia después de ser víctima de estos delincuentes.

Así Jack Nicson Huapaya Zapata (20) “Buitre”, Aldo Gabriel Aguilar Lobatón (23) “Lápiz” y Caleb Guidiche Flores (27) “Toreto” cayeron con tres armas de fuego, diez municiones y dos vehículos de placas BTX-530 y BWM 117.

En toda la capital, abundan similares bandas delictivas que buscan a sus víctimas aprovechando que estas buscan trasladarse de forma rápida.

CIFRAS. Las bandas criminales que operan en autos colectivos han desfalcado el dinero a los usuarios que toman estos vehículos.

De acuerdo a su modus operandi, estos se hacen pasar por el conductor o pasajeros y suelen conocer al revés y al derecho los sectores y paraderos en los cuales cometerán su delito.

De acuerdo al Sistema de Denuncias Policiales, un total de 67 denuncias se han colocado en las comisarías del país que involucran robos en taxis colectivos. Al menos hay 13 paraderos y puntos involucrados, principalmente en San Juan de Lurigancho y distritos de Lima norte (ver infografía).

Con el pasajero a bordo, los delincuentes actúan en grupo. AL menos se han identificado un total de cuatro submodalidades en este delito: viajes millonarios, asalto rápido, somnifero y secuestro express.

Una táctica frecuente conocida como “Viaje de los Millonarios” implica el engaño y el robo rápido a los usuarios desprevenidos. Los delincuentes vendan los ojos de la víctima y la trasladan de un banco a otro, obligándola a retirar grandes sumas de dinero de sus cuentas.

Este cruel proceso se lleva a cabo en cuestión de minutos, dejando a la víctima abandonada en algún lugar desolado.

Otra estrategia común es el “asalto Rápido”, donde los delincuentes registran rápidamente las pertenencias de la víctima para llevarse su celular o dinero en efectivo. Una vez obtenido el botín, la víctima es dejada en cualquier lugar.

Una táctica más insidiosa es la del “Somnífero”, donde los delincuentes rocían un líquido dentro del vehículo para hacer que la víctima se duerma gradualmente, aprovechando su vulnerabilidad para robarle.

Sin embargo, la modalidad más alarmante es el “secuestro express”, en la cual los delincuentes retienen a la víctima durante dos o tres horas, obligándola a realizar múltiples retiros en cajeros automáticos. Además, acceden a las aplicaciones bancarias desde el celular de la víctima para solicitar préstamos o realizar transacciones fraudulentas.