Tiger Woods, golfista norteamericano de 33 años, está en el centro de un escándalo mediático que estalló luego de un confuso accidente de automóvil cuando salía de su casa el 27 de noviembre. Los medios atribuyeron el accidente a una disputa con su esposa generada por una relación extramarital del golfista.
Desde entonces, al menos otras nueve mujeres dijeron haber tenido relaciones con Woods.
Una de estas mujeres es Jaimee Grubbs, una camarera californiana que pidió disculpas por televisión a la esposa del golfista y dijo estar herida tras enterarse que había tenido otras aventuras.
'No sabría decir hasta qué punto lamento haber herido sus sentimientos y hecho mal a su familia', indicó la joven de 24 años en una entrevista difundida el miércoles por la noche en la cadena Extra TV, refiriéndose a la esposa de Tiger Woods, Elin Nordegren.
Woods 'me importaba, no lo hice por motivos superficiales. No lo hice a propósito para herirla', dijo la joven al relatar su relación.
El golfista, que no apareció en público desde que estalló el escándalo, admitió el 2 de diciembre en un comunicado haber cometido 'transgresiones' y lamentó haber 'traicionado' a su familia.
En la entrevista, Jaimee Grubbs indicó que se sintió especialmente herida de enterarse que Tiger Woods habría tenido otras amantes además de ella. Por su actitud, 'tenía la impresión de ser la única', relató.
Tiger Woods y su esposa deberían 'intentar salvar' su matrimonio, aseguró. Pero si se separara, 'seguro que tendría una relación con él', añadió.
Es probable que el escándalo pueda costarle el divorcio a Woods. Casado con Nordegren desde el 2004, ambos tuvieron dos hijos. La separación legal implicaría una reparación civil millonaria calculada en unos $300 millones. A esto se sumaría la repartición de bienes, entre los que se cuentan una casa valuada en $2.5 millones y un yate de $22 millones.
Tomado de Univisión.com

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