En un pequeño pero acogedor espacio, rodeada de niños que interactúan con entusiasmo a cada una de sus indicaciones, encontramos a Mary Cantos Bernal, docente del Centro de Educación Básica Especial (CEBE) 001 Corazón de María, ubicado en Magdalena del Mar, que por medio de videos capta la atención de estudiantes con discapacidad intelectual obteniendo grandes resultados, lo que la llevó a ocupar el tercer puesto en el concurso de innovación educativa organizado por la Fundación Telefónica.
Buena educación. “En 2010 llevé un curso organizado por la Municipalidad de Lima, dictado por el doctor Marco Céspedes, un neurólogo que nos enseñó el uso de herramientas multimedia de estimulación sensorial”, señala la educadora, añadiendo que obligada por una tarea realizó su primer video en Power Point, esto debido a su poco conocimiento de computación y por lo difícil y caro que le resultaba editar un video. “Fue cuestión de creatividad”, sentencia.
Este año cuenta con un aula de innovación educativa en su centro de labores, un espacio en donde reúne a los alumnos que responden a las imágenes y sonidos que emite un proyector, donde los pequeños aprenden como jugando.
Claro que en 2013, cuando empezó a aplicar esta nueva metodología de enseñanza, no tenía aula propia y dictaba clases con su laptop, corriendo el riesgo de que su herramienta de trabajo sufra daño por llamar la curiosidad de sus estudiantes. “Fue difícil llegar a ellos, pues querían golpear la máquina ya que las luces les llamaba la atención, pero aprendieron a controlarse y ahora ya no corremos ese riesgo con el proyector”, confiesa sonriente.
tecnología inclusiva. Sus clases son más que proyecciones de imágenes, pues confiesa que un buen docente debe ser también un buen observador, para descubrir qué técnicas emplear con cada uno de sus alumnos.
“Recuerdo cuando comentaba sobre el tema con algunos colegas y profesores de computación . Estos me decían que los niños especiales no podían usar la tecnología, pero los años han demostrado lo contrario, algo por lo que siento una tremenda satisfacción”, declara Mary Cantos, agregando que el proceso es largo y los logros se dan de “a poquitos”, pero se tiene que ser persistente.
LOS PADRES. La labor de enseñar a los hijos no es exclusiva de los maestros, sino también de los padres, por ello en el CEBE Corazón de María cuentan con horario de asesoramiento para padres y un programa de aulas abierta. “Asimismo, los vamos capacitando para que puedan aprovechar la tecnología que se encuentra en el hogar en beneficio de los hijos”, señala.
Mary descubrió su vocación cuando tenía 10 años y pasaba el tiempo con una prima con dificultades intelectuales, quien fue su motivación para conocer más sobre este campo y como una especialista en la materia con casi 20 años de experiencia, afirma que para implementar esta innovadora metodología solo se necesita una computadora, conexión a internet para investigar y, sobre todo, cariño y amor por los niños, mucha voluntad y ganas de enseñar.