La Gerencia de Fiscalización de la Municipalidad de Lima clausuró ocho establecimientos donde se hacían tatuajes y piercings sin respetar las condiciones de salubridad.
Estos locales, que funcionaban en el Centro Histórico, atendían "en ambientes inadecuados, con malas condiciones sanitarias y sin cumplir con los estándares exigidos para negocios de esta naturaleza", informó la comuna.
La intervención, que fue denominada "Operativo Garabato 1", detectó que los ocho locales funcionaban en la Galería Casa Redher, en la cuadra 4 del Jirón de la Unión.
Marco Cerni, subgerente de Investigación y Difusión, indicó que se encontraron agujas reutilizadas y almacenadas en envases de plástico, algodones y desechos en sitios inadecuados y estupefacientes.