Un nuevo Señor de Muruhuay
Un nuevo Señor de Muruhuay

La fe mueve montañas. Con sus propios recursos, los devotos de la milagrosa imagen del Señor de Muruhuay han empezado el mejoramiento y embellecimiento de la Plazuela del Santuario, que incluye la remodelación de pistas y veredas.


Considerado entre los cuatro santuarios más importantes del país por la Conferencia Episcopal, el del Señor de Muruhuay, ubicado en el distrito de Acobamba, Tarma, Junín; recibe todos los días a sus fieles seguidores que se cuentan en cientos de miles de todos los rincones del país y del extranjero. Pero en mayo la devoción se desborda, ya que es el mes en el que se celebra la aparición, en 1835, de la cruz pintada en una roca de Muruhuay, que dio al nacimiento a la veneración que ha crecido impresionantemente con el tiempo. 


Justamente, para dar un mejor recibimiento a sus cada vez más numerosos feligreses, los devotos que han sido bendecidos por sus milagros se han puesto sobre sus hombros esta titánica obra, cuya primera etapa ya está en ejecución.


Sin embargo, como bien precisa Rocío Mendoza Romero, presidente del Comité de la Obra, se necesita del desprendimiento de todos los devotos, sean empresarios o trabajadores, para que este proyecto se termine y sea un orgullo de Acobamba y Tarma. Quienes deseen hacer su donación pueden llamar al teléfono celular 988009141. 


Bajo el lema “Con un poco de muchos, podemos hacer esta gran obra” y el impulso de dos empresarios acobambinos, Antonio Camayo y Manuel Ponce, además de la colaboración de todos los que quieran sumarse, se espera que el proyecto sea pronto una realidad.