¡Lucila Campos es una mujer de coraje! Lo demostró ayer, cuando a menos de un mes de haber sufrido la amputación de su pierna derecha, la popular cantante criolla se hizo presente en la peña Del Carajo, en donde recibió su mejor medicina, el cariño de su pueblo que la recibió con sonoros aplausos y dando hurras con su nombre.
Fue la primera reaparición pública de la popular tía lisurita desde que los médicos del Hospital Rebagliati decidieran amputarle una de sus piernas por un problema generado por la diabetes que padece.
Mi madre está ansiosa de reencontrarse con su público, ella ya está viniendo gracias a un permiso especial que le han otorgado los médicos del Rebagliati, porque aún no ha sido dada de alta, nos dijo su hija mayor, Zoila.
Y no hubo que esperar mucho para volver a ver a la gran cantante criolla. A las 4 en punto de la tarde un taxi se detuvo a media cuadra del ingreso principal de la peña barranquina. Allí traían a doña Lucila, quien fue cargada por un sobrino para luego sentarla en una silla de ruedas. Y vimos su rostro, pero no sus ojos, porque tenía unos lentes oscuros puestos.
Lucía bien, pero algo ansiosa, de saber quizá cómo la recibiría su público que desde las 11 de la mañana había empezado a copar las instalaciones de la peña en que los dueños le organizaron un homenjae por sus 53 años de vida artística. El ingreso costaba 20 soles, con pollada incluida.
Lo recaudado será destinado a solventar los gastos de la enfermedad de la querida cantante criolla. Se pusieron a la venta mil polladas que se agotaron a las 3 de la tarde.
Pero han mandado traer más pollos, nos dijo su hija Zoila, quien luego corrió al encuentro de su madre.
-Bienvenida doña Lucila.
Gracias, gracias.
-Cómo se siente?
Ya un poquito mejor.
-La vemos con buen semblante.
Me encomendé al Señor de los Milagros y por El me siento mejor.
-Sabe que las polladas ya se acabaron, mucha gente ha venido a darle su apoyo.
Gracias, yo también los quiero.
Y como lo temíamos, ver a tantos periodistas rodeándola y escuchar los aplaudos del público, emocionaron demasiado a doña Lucila, que se puso a temblar y eso preocupó a su hija Zoila.
Les ruego amigos periodistas que no la aturdan, respeten su estado, nos dijo. Mientras que el animador del evento la calmaba diciéndole: Tú eres una mujer valiente, Lucila.
La cantante Lucía de la Cruz había llegado al local justo a tiempo para conducir a su querida amiga en su silla de ruedas.
Hoy vendo mi cuerpo por ti Lucila, le dijo.
La reconocida folclorista Teresa Palomino no pudo contener las lágrimas al ver a su amiga. Fueron contados los artistas que se hicieron presentes en este homenaje, pero para Lucila Campos fue suficiente sentir el cariño de su pueblo.
Agradezco a todo el personal de la peña. Estoy contenta. No puedo cantar porque estoy emocionada y feliz de estar aquí con mi público y amigos, dijo en breves palabras Lucila Campos, que acaba de cumplir 71 años de vida y ha prometido volver a cantar organizando sus populares polladas.