Decir que la UNMSM se desangra es una exageración, pero sí resulta válido advertir que la Decana de América se ha convertido en algo así como tierra de nadie, en la que cualquier hijo de vecino puede traspasar sus linderos para matar y herir a sus estudiantes, como ha ocurrido en el último mes.
Aquí se juntan dos responsabilidades: la de vigilancia, que implica darle seguridad a todos los alumnos, y la revisión médica seria para detectar anomalías en los ingresantes o grueso estudiantil.
Si la inseguridad se apodera de las universidades, ya qué otra cosa no se puede esperar.
OJO CON ESTO:
Con OJO crítico: A trazarse metas
Con OJO crítico: Derrota que duele
Con OJO crítico: El poder y la mentira
Con OJO crítico: El atún contaminado
HAY MÁS...