Los Juegos Olímpicos París 2024 van llegando a su fin, y en lo que va del evento he seguido de cerca al equipo peruano que ha participado en distintas disciplinas deportivas. Ayer, una gran alegría nos dio el velerista Stefano Peschiera, quien consiguió una histórica medalla olímpica de bronce. Algunas competencias tuve que verlas de madrugada por YouTube debido al cambio de horario, ya que Francia nos lleva siete horas de diferencia. Esa experiencia del cambio de horario lo viví cuando viajé hace unos años a Europa y tenía que adaptarme; es decir, a cambiar mi rutina de sueño.
Es el efecto llamado jet lag, el cual se refiere al trastorno del “reloj corporal interno” debido a constantes viajes que atraviesan distintas zonas horarias. Un “dolor de cabeza” fue para mí “aclimatarme” al reloj en Rusia ya que presentaba nada menos que once husos horarios debido a su gigantesca geografía. Confieso que he conocido varias ciudades en la tierra de Putín pero en realidad necesitaría retornar innumerables veces o quedarme a vivir una temporada muy amplia para descubrir la inmensidad del pueblo ruso. Siempre vuelven los recuerdos cuando caminé por Moscú, Saransk, Ekaterimburgo, Sochi, Samara, Kazan y San Petersburgo. En cada una de estas ciudades tengo muchas historias que contar pero volvamos a los Juegos Olímpicos en el país de la artista parisina Edith Piaf.
Nuestros compatriotas vienen defendiendo los colores de la bandera peruana con coraje y honor. Y precisamente ese honor fue lo que tuvo también la selección peruana de fútbol en las Olimpiadas de Berlín de 1936 en Alemania, y durante el régimen nazi del genocida Adolf Hitler. Hoy, 8 de agosto, se cumple un aniversario más de aquel polémico partido contra la selección de Austria (Hitler nació y se crió en ese país) en el estadio Hertha BSC Platz, actualmente el Estadio Olímpico de Berlín. Ese día se celebraba el choque por cuartos de final y la blanquirroja ganó 4-2 a los austriacos y pasaba a la semifininal pero, según algunas versiones, el líder nazi habría ordenado que se volviera a jugar el partido por lo que los peruanos por su honor y dignidad decidieron retirarse del certamen deportivo.
Entre los jugadores del equipo peruano se encontraban Teodoro “Lolo” Fernández, Juan “El Mago” Valdivieso, Jorge Alcalde, Alejandro “Manguera” Villanueva, Segundo Castillo, entre otros. Uno de los libros que describe al detalle el periplo por tierras lejanas del conjunto patrio es “Lolo en Europa. Universitario, el equipo de todos los peruanos”, de la Editorial Mesa Redonda y una investigación rigurosa realizada por Alékxander JJ Cassis y Luis Fabrizio Álvarez. El libro cuenta principalmente la presencia del ídolo crema en su visita a distintas ciudades europeas durante la gira del Combinado del Pacífico, integrado por cuatro futbolistas chilenos y 13 peruanos. Sucedió entre los años 1933 y 1934. “Lolo” jugó más de 30 partidos en diez ciudades europeas y fue el primer jugador sudamericano que metió un gol en la cuna del fútbol; es decir, en Londres (Reino Unido).
Un dato revelador del libro. El cañetano estuvo en España, Inglaterra, Checoslovaquia, Irlanda, Alemania, Escocia, Países Bajos, Italia y Francia. “En los periódicos alemanes se publica la programación del partido de Perú-Polonia, que iba a ser la semifinal de las olimpiadas luego de que se venciera a Austria y que nunca se jugó. Hitler mandó a diseñar unas medallas para los directivos de los comité olímpicos y en una lista encontré el nombre de dos peruanos. Ellos eran el presidente Eduardo Dibós Dammert y Carlos Cáceres Álvarez. Los dos rechazan las medallas. Entonces, más que hablar que Perú humilló a Hitler, creo que rechazar las medallas a Hitler tiene mucho valor”, revela Alékxander, quien radica en la isla sueca de Gotland. Refiere que en su libro se narra temas inéditos del club crema entre los años 1929-1939. Ayer, el Club Universitario de Deportes festejó a lo grande su centenario de fundación. Abrazos a todos los que son parte del universo crema. Nos vemos.