Hoy se cumplen 43 años del inicio del ataque perpetrado por la banda terrorista Sendero Luminoso contra el Perú y todos sus habitantes, miles de los cuales perdieron la vida o sufrieron heridas incurables por culpa de estos salvajes liderados por el genocida felizmente fallecido Abimael Guzmán, uno de los más grandes carniceros que ha conocido el mundo entero. El 17 de mayo de 1980 se inició en Chuschi, Ayacucho, uno de los capítulos más oscuros y sangrientos de nuestra historia. Salimos de esa crisis. Los criminales fueron derrotados por todos los peruanos, con militares y policías por delante, pero esa “ideología” del odio sigue vigente. Lo vimos con la elección del golpista Pedro Castillo, quien postuló hermanado con el Movadef, que es la nueva versión de Sendero Luminoso. Por eso, los peruanos de bien jamás deben bajar la guardia ante estos criminales, pues andan buscando el momento para dar un nuevo zarpazo contra los ciudadanos. Al terrorismo genocida no se puede dar ni un centímetro de espacio.