¡Batacazo!
¡Batacazo!

Un gol de Mario Gómez, en el minuto 90, permitió ayer al Bayern de Munich imponerse por 0-1 al Inter de Milán y deja a los alemanes en bandeja la clasificación para los cuartos de final de la Liga de Campeones si consiguen hacer valer en casa este resultado dentro de tres semanas.
Ambos equipos reeditaron ayer en el estadio Giuseppe Meazza de Milán la última final de Liga de Campeones, en la que los italianos se impusieron por 0-2 con dos tantos de Diego Milito. Sin embargo, esta vez no estaban ni el argentino, lesionado, ni el claro dominio con el que el Inter ganó la pasada temporada, dirigido por Jose Mourinho.
Ambos equipos gozaron de numerosas oportunidades en un partido que estuvo muy equilibrado, pero el mayor control del balón por parte del Bayern y el juego ofensivo cimentado en el trabajo de Robben y Ribery acabaron decantando el marcador del lado alemán. Después de un segunda parte en el que el Bayern controló el juego, Mario Gómez consiguió 'in extremis' el gol de la victoria, en el minuto 90, aprovechando un rechace del portero brasileño Julio César tras un disparo de Robben desde fuera del área.