En medio de la pandemia a causa del coronavirus o Covid-19, una llama se ha vuelto la sensación al ser utilizada para hacer deliverys.
En Gales, unos granjeros se han ingeniado para hacer llegar sus productos a sus clientes y usan la llama para entregar los suministros. El animalito se llama Max y lleva los productos a personas que viven alejadas y están confinadas.
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La llama lo hace en compañía de sus dueños y de paso alegra a sus clientes. Además, con Max, se puede recorrer lugares accidentados que con un vehículo no se podría hacer.
Antes de la pandemia, la llama de tres años de edad era usada para hacer excursiones con turistas, pero tras los bloqueos, ha sido utilizada de una manera creativa.