Aprovecha el sentido del tacto en el sexo

¿Te acuerdas de ese famoso libro que decía que las mujeres son de Venus y los hombres de Marte? Bueno, quizás no estaba tan equivocado. Al parecer tenemos naturalezas distintas, y eso se puede apreciar en el terreno sexual.

Una forma de hacer evidente nuestras diferencias está en la manera de excitarnos. En el caso de los hombres, ellos prefieren los estímulos más explícitos, como el ver escenas sexuales. Las damas en cambio son más sensibles a las palabras, los susurros y, por supuesto, las caricias.

El potencial sexual del sentido del tacto es amplio en individuos del género femenino. Estos poseen más zonas erógenas y más sensibles. Por eso, hay muchos casos de mujeres que han alcanzado orgasmos no genitales. Es decir, al acariciar los pezones, por ejemplo.

¿Entonces, qué hacer? Sácale provecho a esa capacidad física y juega con tu cuerpo, tocándote y haciendo que él te toque en esas partes que te hacen suspirar.