Sin duda está presente en la mayoría de hogares. Ya sea en el desayuno, almuerzo o algún postre, la leche es uno de los ingrediente principales de nuestra alimentación. Esto porque contiene proteínas, grasas e hidratos, vitaminas A, potasio, magnesio y sobre todo calcio. Sin embargo, pese a todo su aporte nutritivo puede caer mal al organismo debido a un componente llamado lactosa.
En ese sentido las personas intolerantes a la lactosa al consumir leche pueden presentar síntomas como molestias abdominales, diarrea, flatulencia, distensión abdominal, náuseas e incluso vómitos. Razones por las cuales deben prescindir de este alimento en su dieta. Aún así existen alternativas para quienes tienen este problema.
Por ejemplo están los vegetales dado$2que carecen de las grasas y las proteínas de la vaca, las cuales son poco saludables. Está en ese caso la soya que contiene ácidos grasos esenciales y libres de colesterol. También la avena que es de fácil digestión, buena fuente de fibra y vitamina B. Todo esto ideal para fortalecer nuestros nervios.
De igual manera está la almendra que ayuda a regular los niveles de colesterol. La avellana por su parte brinda calcio, hierro y potasio. Es además rica en fibra y vitaminas A y E. En tanto nuestra quinua es considerado como el cereal con más proteínas, favorece la digestión y aporta muchas vitaminas y minerales.