¿De vuelta al trabajo? 4 Tips sobre la lactancia materna

Conciliar el trabajo y la maternidad es una tarea complicada, sobretodo cuando se trata de amamantar al bebé. Para muchas mujeres, dejar de amantar a sus pequeños para ir a trabajar puede ser motivo de angustia, pero todo tiene solución.

Que no puedas darle pecho a tu bebé durante las horas de trabajo, no significa que él deba dejar de tomar leche materna, puedes extraerla y almacenarla para su posterior uso. ¿Y por qué es tan importante la leche materna? Porque le brinda al pequeño todos los nutrientes que necesita para su correcto desarrollo. Si estás por volver al trabajo, ¡presta atención!

¿Cuando? Si vas a regresar a trabajar lo más recomendable es que comiences a extraerte la leche 15 o 20 días antes de volver a la oficina, para que se adecue a las necesidades nutricionales de tu pequeño.

¿Con qué frecuencia? Si estarás fuera de casa por ocho horas o más, necesitas tres extracciones. Esto evitará que tengas congestionamientos y molestias y asegurará un buen volumen de leche.

¿Cómo almacenar la leche? Hoy en día existen numerosos extractores de leche manuales y eléctricos que hacen la tarea más sencilla. Aunque los especialistas recomiendan la extracción manual a través de masajes. Si vas a extraerte la leche, asegúrate de hacerlo en un ambiente íntimo y sin interrupciones.

¿Cómo almacenarla? La leche materna se conserva a temperatura ambiente a menos de 26 °C durante cuatro horas, en la refrigeradora por 48 horas, en el compartimiento del congelador por unos cuatro meses y en un freezer independiente puede permanecer por unos seis meses.

¡Ojo!

Es importante que le ofrezcas el pecho al bebé antes de salir y al volver de trabajar. Esta estrategia te permitirá asegurar la producción estable de leche. ¡No lo olvides!

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