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Para muchas parejas y personas solteras, la tenencia de mascotas se ha transformado en un estilo de vida. Algunos les compran ropa, alimentación especial, juguetes y gollerías que hacen que este vínculo sea muy similar al que existe entre e hijos. 

Estas parejas que cuidan a sus perros o gatos con especial esmero son llamados los PP (Pet Parents) o "padres de mascotas" porque se desviven por sus peludos .

Causas y efectos

Si bien es cierto que las mascotas son un antídoto contra la soledad y alivian el estrés, humanizar a los animales hace que las conductas de ellos también cambien y se vuelvan más complejas. Por ejemplo, desarrollan estrés o ansiedad ante cualquier partida de sus dueños.

Uno de los factores que lleva a que esta conducta sea más numerosa es sin duda el aspecto económico, muchas parejas no pueden sufragar los gastos de tener un hijo todavía, pero tienen ese instinto paternal y maternal de querer criar un ser vivo porque van sintiendo que la casa está vacía. Por ello, quienes más lo hacen son las personas con un buen nivel profesional.

Para los dueños lo más importante es no perder el contexto, una no es equivalente a un hijo y a lo mucho puede servir solo como un ensayo bastante lejano de lo que es en realidad la paternidad.

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