DT Jorge Sampaoli tiene a Europa como un próximo destino

La nominación de Jorge Sampaoli al premio al Mejor Entrenador del Año, que se entregará este lunes durante la tradicional gala del Balón de Oro en Zúrich, puede ser el reconocimiento definitivo para que el técnico argentino entrene al fin en Europa.
A sus 55 años, el entrenador nacido en Santa Fe se ha hecho con un nombre en Sudamérica, pero no fue hasta sus recientes éxitos con la selección chilena, y sobre todo la victoria en la última Copa América, cuando Sampaoli se ha dado a conocer en el fútbol europeo.
Pese a tenerlo muy difícil para ganar el premio al Mejor Entrenador en 2015, sobre todo por la presencia entre los tres finalistas del español Luis Enrique, ganador de cinco torneos con el Barcelona, la nominación de Sampaoli entre los tres finalistas (el otro aspirante es Pep Guardiola) es ya todo un reconocimiento para Sampaoli, aunque él rechaza protagonismo.
"El premio no me corresponde solo a mí, es por cómo juega Chile y solo represento a Chile", declaró en una reciente entrevista a la emisora española Cadena Cope.
"La valoro muchísimo (la nominación), pero no por mí, sino como se consiguió y por estar en el podio con gente que valoriza mucho el ataque", insistió.
Sampaoli, al igual que Guardiola y Luis Enrique, prioriza el juego de posesión y de ataque, aunque por sus palabras se ve que está más cerca del técnico del Bayern.

- Bayern como equipo, Barça por los jugadores -
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"Si quiero ver un gran equipo miro al Bayern Múnich. Si quiero ver buenos jugadores miro el Barcelona. El resto de equipos no me generan mucho", declaró en esa entrevista.
"Veo muchos partidos cada fin de semana y la conclusión cada fin de semana es que he visto muy poco fútbol", precisó.
Desde que se entrega este premio (en 2010), ningún técnico de club sudamericano o seleccionador de algún país que no sea Europeo ha estado entre los finalistas al Mejor Entrenador del Año.
Sampaoli, que será el único de los tres nominados presente en la gala, es el primero.
Solo su compatriota Diego Simeone fue finalista (tercero) en la pasada edición, en la que ganó el seleccionador alemán Joachim Löw, pero el 'Cholo' lo hizo como técnico del Atlético de Madrid español.
Sampaoli, que está al frente de La Roja desde finales de 2012, ha conquistado con su juego atrevido y alegre al hincha chileno y al aficionado al fútbol en general, que quizá le descubrió en el Mundial de Brasil, donde después de eliminar a la campeona España en la fase de grupos, tuvo contra las cuerdas en octavos a la anfitriona, que solo venció en los penales y después de que Mauricio Pinilla estrellase un disparo en el larguero en el último suspiro de la prórroga.
La confirmación definitiva para Sampaoli llegó el pasado mes de julio, cuando llevó a Chile a su primer título internacional, derrotando en los penales a la Argentina de Lionel Messi.
Fiel al 'sello Sampaoli', Chile destacó por su gusto por el juego ofensivo (fue máximo anotador del torneo con 13 goles pese a no contar con ninguna 'estrella' deslumbrante), la posesión de balón como arma defensiva, el gusto por el 'toque' y una circulación vertiginosa de la pelota, que nace de la presión asfixiante sobre sus rivales.

- Triunfo del fútbol de toque -
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No es casual el reconocimiento de este modelo, que en los últimos años, según el palmarés del Balón de Oro, se ha impuesto al que representan otros técnicos, como el portugués José Mourinho o el mismo Simeone, igual de válido que el primero, pero en el que el resultado es lo que prima, por encima de cómo se consigan los éxitos.
Así, después de que Mourinho ganase la primera edición de este premio en 2010, posteriormente lo han obtenido Guardiola, el seleccionador español Vicente del Bosque, el alemán Jupp Heynckes y su compatriota Löw.
Quizá el éxito por este modelo de juego sea lo que acabe llevando a Sampaoli a firmar en un futuro por un equipo europeo, aunque quizá la 'filosofía' del técnico argentino choque con los intereses del fútbol europeo actual.
"Lo que más me interesaría es que alguien se interese por modificar estructuras que tienen que ver con retroceder un poquito en el tiempo, hay que encontrar le fútbol del pasado para mejorarlo, para que tenga más alegría y para que disfrute más la afición y no solo se conforme con ganar".
Un equipo "en el que se valorice el intento por jugar mejor, no solo por ganar". Complicado encontrarlo en el 'histérico' fútbol europeo.