“Quisiera pedirles a todos una oración especial por el papa emérito Benedicto, quien, en silencio, sostiene a la Iglesia”, dijo el papa Francisco en su sorpresivo anuncio en italiano al final de su audiencia general semanal.

“Está muy enfermo. Pidamos a Dios que lo consuele y lo sostenga en su testimonio de amor a la Iglesia hasta el final”, agregó.

En el mismo sentido, el director de la oficina de prensa del Vaticano, Matteo Bruni, confirmó el “agravamiento” de las condiciones de salud de Joseph Ratzinger (95 años), quien ocupó el mayor cargo del Vaticano de 2005 a 2013.

Hasta ahora, Benedicto no ha sido trasladado a ningún hospital y su estado está “bajo control” médico, continuo Bruni.

“En las últimas horas se ha verificado un agravamiento debido a su avanzada edad. La situación en este momento está bajo control, atendido constantemente por los médicos”, dijo Bruni en una nota de prensa.

Francisco visita a Benedicto XVI en el monasterio Mater Ecclesiae

Al término de la audiencia general, el Papa Francisco se dirigió al monasterio Mater Ecclesiae, donde reside Benedicto XVI, para visitarlo.

De acuerdo con el periódico El Mundo, el pontífice tiene problemas respiratorios y requiere asistencia artificial.

De hecho, el personal evaluó trasladarlo al hospital Gemelli de Roma, donde suelen acudir los papas.

Sin embargo, hasta el cierre de esta edición, Benedicto XVI permanecía en su residencia.