Han pasado muchos años para que la cantante Alejandra Guzmán se recupere por completo de la operación que la puso al borde de la muerte.
En 2007 -hace nueve años- la mexicana se retocó el trasero, pero tras aplicarse una sustancia en un famoso centro de estética de la Ciudad de México, empezó a vivir una de las pesadillas más grandes de su vida.
La rockera sufrió una fuerte infección en el 2009, cuando el líquido que le inyectaron comenzó a exparcirse por su cuerpo, y aunque hoy se encuentra saludable y viva para contarlo, en aquel momento muchos médicos pensaron que no superaría el cuadro tan grave que presentaba.
La Guzmán se sometió a más de 20 cirugías e intervenciones para retirar la sustancia tóxica de su cuerpo, y además fue necesario ponerle un implante de titanio para recuperar la movilidad de su cadera.
Lo cierto es que hoy en día, la pesadilla ya quedó en el pasado, y Alejandra compartió una fotografía en Instagram en la que luce feliz su trasero, mostrando que se encuentra sano y hermoso.