En Puno, una escolar falleció luego de que una de sus compañeras de clases intentara estrangularla, según denunciaron sus padres. En el Callao, una menor quedó gravemente herida tras haber sufrido cortes en la cara y cuello por parte de otra alumna de su colegio.
Estos casos, ocurridos en los últimos meses de este año, reflejan cómo la violencia escolar se viene agravando en las instituciones educativas del país. De los 15,086 reportes registrados, hasta octubre del 2023, en el portal Siseve, del Ministerio de Educación (Minedu), un total de 9657 se dieron entre escolares, lo que representa el 64 %.
Dicha cifra revela un importante aumento comparado al 2022 pues durante ese mismo periodo hubo 5523 reportes de violencia escolar entre alumnos, de los 8893 que se registraron en total. Es decir, los casos subieron en alrededor del 75 %.
Modalidades de violencia más recurrente en colegios
De los más de nueve mil casos reportados en el año, la mayoría (4870) involucró violencia física y se presentaron sobre todo en el nivel secundario. En más de la tercera parte, las víctimas sufrieron lesiones y los agresores perpetraron el maltrato de dos a más veces.
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La violencia psicológica, que se traduce en acoso escolar, intimidación, ciberacoso, aislamiento, entre otros, es la segunda más recurrente con 3548 casos, y la violencia sexual, cuya forma más cruenta es la violación sexual, afectó a 1235 escolares.
Sobre esta problemática, la Contraloría alertó que faltan psicólogos para la atención y seguimiento de casos de violencia escolar, lo que conlleva a una limitación de prevención e inacción.
OJO AL DATO. Lima concentra la mayoría de casos de violencia escolar, pero se han presentado episodios en todas las regiones.