Una fiesta rojiblanca se vivió en la Gran Parada y Desfile Militar, a donde acudieron cientos de personas de varias partes del país y de Lima. Desde muy temprano, familias enteras se hicieron presentes en la avenida Brasil, escenario de este tradicional evento de Fiestas Patrias, al igual que los comerciantes que aprovecharon la masiva concurrencia para vender todo tipo de productos y alimentos.
Debido a que en las primeras horas del día el clima era frío y hubo garúa, el público se las ingenió para protegerse. Además de llevar paraguas y usar prendas abrigadoras, algunos optaron por convertir bolsas de basura en protectores impermeables.
La señora Marisol, quien vive en Huachipa, llegó desde muy temprano junto a sus hijos de 5 y 6 años, quienes fueron vestidos con trajes de marinera para ver el desfile. “Quisieron venir así y disfrutan mucho del desfile”, refirió.
También hubo quienes llevaron a sus mascotas. Es el caso de Miguel Ángel Salomé, quien como todos los años estuvo con Perlita, Rubí y Rocky, sus perritos que llevaban disfraces.
La gastronomía peruana se lució pues a lo largo de la avenida Brasil se desplegaron puestos de comida variada como anticuchos, juanes y caldo de gallina. Doña Lila, quien vende en la cuadra 14 del jirón Pastaza en Breña, aprovechó la oportunidad para ganar un dinero extra. “Es el segundo año que vengo y espero vender todo”, dijo a OJO.
Para disfrutar con una mejor vista de la Gran Parada y Desfile Militar, muchos ciudadanos tuvieron que pagar entre seis y diez soles a fin de conseguir una silla o banca, que previamente había sido colocado en la avenida Brasil. También las alquilaban a dos por 15 soles.
Quienes tuvieron una vista privilegiada fueron los ciudadanos que residen en edificios ubicados en esta vía. Familias decoraron sus viviendas e invitaron a familiares o amigos para ver el desfile.
El Desfile contó con la presencia de más de 6 mil participantes, entre integrantes del Ejército, Marina de Guerra, Fuerza Aérea, Policía Nacional, y otras instituciones convocadas. El desfile comenzó con comparsas de la costa, sierra y selva, que cantaron y bailaron a su paso.
Algunas participaciones destacadas fueron la gracia y coordinación de las caballerías del Ejército; las maniobras del equipo de motorizados de la Policía; el paso de los veteranos de Guerra y la Pacificación Nacional.