Sin presagiar que la muerte lo esperaba en su paradero, el conductor de una combi se detuvo a recoger pasajeros y un sicario lo asesinó al dispararle en la cabeza, a las 6:20 a.m. de ayer en San Juan de Miraflores.
El móvil de este asesinato sería la venganza de extorsionadores por la negativa de Jorge Raúl Espíritu Ávila (48) a pagar un cupo diario de S/5 que le exigían, como a otros transportistas, para poder trabajar sin problemas.
El cobarde crimen ocurrió en el kilómetro 10 de la carretera Panamericana Sur, en el paradero Tottus, en el puente Atocongo.
Según testigos, la víctima llegó conduciendo su combi de placa de rodaje AMS-768, con su cobrador y pocos pasajeros en la unidad.
Ataque. Como es costumbre, el cobrador bajó de la combi para llamar a más pasajeros y Jorge Espíritu se quedó sentado ante el volante, manipulando su celular.
En ese momento, sin que nadie sospeche, un sujeto abordó la combi, que se hallaba detenida, se sentó detrás del conductor y en segundos sacó su arma de fuego y sin mediar palabra le disparó dos veces por la espalda, en la cabeza, a la altura de la oreja izquierda. Luego, escapó a pie.
Los pasajeros escaparon despavoridos del vehículo tras el estruendoso ruido de los proyectiles. El cobrador intentó auxiliar a su amigo, pero este ya había expirado.
Agentes de la División de Homicidios de la Dirincri investigan el caso.
El cuerpo sin vida del chofer quedó dentro de su vehículo.
Algunos testigos del crimen declararon que el asesino estuvo sentado en la vereda por varios minutos, esperando a la combi.