Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Angélica, de 25 años, de Carabayllo:

Doctora Magaly, le escribo con la esperanza de que pueda ayudarme. Estoy pasando por un momento muy duro en mi relación con Armando, con quien llevo un año de enamorados. Nos conocimos en el trabajo, somos analistas de crédito en un banco. Soy una chica que ha sido criada de una manera tradicional, bajo principios católicos. Voy todos los domingos a misa y me confieso periódicamente. Esto podría parecerle extraño, porque no es común encontrar a una chica de mi edad con estas costumbres.

Armando no es un chico de fe, pero respeta mis principios. Nos llevamos muy bien, pero desde hace unos meses hemos empezado a tener problemas porque él me insiste en que le dé la “prueba de mi amor” y yo le he dicho que no, porque quiero llegar pura al altar y solo entregarme en cuerpo y alma a quien será mi esposo.

Armando me dice que esas ideas son “chapadas a la antigua”, que es normal que las parejas lleven una vida sexual activa. Le he pedido a Armando que espere hasta casarnos. Me ha dicho que ya esperó un año y que si no me entrego a él es porque en realidad no lo amo.

Doctora, no crea que soy una mujer de hierro, yo también siento, y créame cuando le digo que también quisiera entregarme totalmente a Armando, lo amo y creo que es el hombre de mi vida, pero mis principios son más fuertes que mis deseos carnales. ¿Usted cree que hago mal si espero a casarme para tener intimidad con mi pareja?

CONSEJO

Querida Angélica, no te sientas presionada a hacer algo de lo que no estás segura. Si tú has decidido esperar a casarte para iniciar tu vida sexual, está bien. Armando debe respetar tu decisión, y si realmente te ama, sabrá esperar. Habla con él sobre sus planes a futuro; si él no piensa casarse contigo, mejor es que terminen su romance y cada uno busque su felicidad. Suerte.