Hola, soy Magaly Moro y leo todos los días tu caso del corazón para darte un consejo. Siempre protejo la identidad de las personas que me escriben porque esta historia podría ser la de cualquiera.

El amor nos impulsa a ser mejores personas, pero también nos puede cegar y poner contra la espada y la pared. En este espacio recibirás un consejo, el consejo de una amiga anónima. Ojo, esto no es una terapia. En muchos casos sí es importante recurrir a una, ya sea solo o en pareja.

Hoy te cuento la historia de Álex, de 42 años, de San Martín de Porres:

Doctora Magaly, agradezco de antemano su consejo. Llevo un año de relación con Natalia, y hace seis meses me fui a vivir a su departamento. Usted pensará que las cosas se han dado demasiado rápido, pero ya no somos unos jovencitos, mi novia tiene 40 años y yo 42.

Cuando comencé a salir con ella nunca me preocupé en preguntarle si ella planeaba ser mamá. El día que decidimos convivir, supuse que el siguiente paso era formar una familia. Grave error.

Hace unas semanas asistimos a la matiné de mi sobrina, cumplía un añito y vi a Natalia feliz jugando con la pequeña. Pensé que el instinto maternal había despertado en ella, pero cuando mi prima le dijo “se te ve bien con la bebé”, Natalia respondió en el acto: “solo para un rato, no pienso ser mamá”. Al escucharla casi me caigo de espaldas.

Cuando llegamos a casa le pregunté si realmente pensaba nunca tener hijos. Me dijo que no se sentía en edad para criar a un bebé, que prefería viajar y no tener responsabilidades.

Doctora, yo me muero por ser papá, a mí me encantan los niños, y no veo la hora de tener hijos. Pero desde que escuché que mi amada no quiere ser madre, no sé qué hacer. Sé que no puedo obligarla a que haga algo que no quiere solo por complacerme, pero tampoco creo justo que yo deba olvidar mi sueño de paternidad por ella.

Realmente amo a Natalia, pero siento que esto puede separarnos. ¿Qué hago?

CONSEJO

Querido Álex, conversa seriamente con Natalia, explícale lo importante que es para ti ser papá y que te gustaría hacer realidad ese anhelo con ella. Si pese a todos tus argumentos ella continúa en la negativa de ser madre, lo mejor es que replantees tu relación. Piensa bien si estás dispuesto a hacer a un lado tus sueños de paternidad para seguir a su lado. Suerte.