"Maté a mi chica"
"Maté a mi chica"

Mi chica, he matado a mi chica, que Dios me lleve, fue lo que le dijo el velocista discapacitado sudafricano Oscar Pistorius a su amigo Justin Divaris, la madrugada del 14 de febrero, luego que disparara y matara a su novia, Reeva Steenkamp.
Divaris, tras oír a Pistorius, acudió hasta la casa del atleta que ya se encontraba cercada por la policía. Pistorius estaba detenido en el garaje, pero me dejaron hablar con él, dijo.
De otro lado, la idea de que Reeva fue disparada mientras estaba sentada en el inodoro va cobrando fuerza, e incluso que aún estuviera viva cuando Pistorius la bajó en brazos por las escaleras para tratar de reanimarla.
La policía encontró un bate ensangrentado en casa de Pistorius.