Claudio Pizarro, actual delantero del Werder Bremen alemán, afirmó ayer que lo involucraron en el caso de la empresa Image y la presunta venta ilegal de futbolistas peruanos al exterior, porque le tienen envida y celos.
Yo no tengo ningún problema con nadie. Tengo la conciencia limpia. En el Perú hay gente que habla mal por envidia o por celos, pero también tengo buenos amigos que me apoyan y reconocen lo que hago. Eso me da fuerza, dijo Pizarro, de 31 años, en una entrevista concedida al diario alemán Weser Kurier.
Sobre su labor en Werder Bremen dijo que mis compañeros hacen que mi trabajo sea más fácil. Ellos se mueven mucho, crean espacios y luego me dan el balón.
Señaló que quizás cuando cumpla 35 años decida regresar a Lima para terminar su carrera, aunque confesó que también puede ser que juegue en Qatar, Dubai o en alguna ciudad de Estados Unidos, donde se pueda vivir bien y jugar al fútbol. Regresar al Perú es otra posibilidad.
También habló de su paso por el Chelsea inglés. No es bueno tener demasiadas estrellas como sucedía en Chelsea. En Werder Bremen todos somos jugadores regulares.
Preguntado cúal es la diferencia principal entre Werder Bremen y Chelsea?, señaló entre risas: el dinero.
Werder Bremen se ha convertido en un equipo importante no sólo en Alemania, sino también en toda Europa. Ahora queremos llegar a la Liga de Campeones. Quiero quedarme en este club, aunque nunca se sabe, pero por ahora mi cabeza sólo está pensando en lograr mis objetivos aquí. Además, Bremen es mi segundo hogar. Me siento bien recibido, precisó.
Pizarro se encuentra apenas a doce goles de convertirse en el máximo goleador extranjero en la historia de la Bundesliga y esa es otra motivación para el delantero inca.