Recientes estudios determinan que la lactancia materna aporta importantes ventajas, como un buen estado nutricional, mayor protección inmunológica, menor riesgo de sensibilización alérgica, menor morbilidad y mortalidad infantil; además de prevención de enfermedades posteriores, como la diabetes, la arteriosclerosis, la obesidad y la hipertensión arterial.
Para cumplir esta importante misión es crucial el cuidado de las mamas, ya que éstas son las encargadas de producir este valioso alimento. Al respecto, el doctor José Ricardo Olavide, gineco-obstetra, señala que la higiene adecuada es fundamental, así como el cuidado de los pezones, la parte física más delicada de la relación madre-niño.
Es muy importante que las madres o futuras madres, durante el embarazo preparen los pezones. Estos deberán estar bien formados para permitir una adecuada adaptación a la boca del bebé, añade.
Es necesario instruir a la madre sobre las técnicas adecuadas para dar de lactar y la manera en que el bebé debe coger el pezón.