Los gays chinos, considerados enfermos mentales hasta hace una década, ahora son víctimas de tratamientos que supuestamente 'curan' su orientación sexual, en forma de terapias y medicamentos considerados una estafa tanto por el colectivo y los sexólogos.
'No se puede decir que curemos al cien por cien a la gente. En teoría es así, pero nadie nos creería si lo dijéramos', indica una de estas clínicas en conversación telefónica en el documental 'Tratamientos que curan', dirigido por el cineasta y actor gay Xiaogang Wei.
Estos tratamientos usan la psicoterapia, medicamentos y antidepresivos. En el pasado incluso se usaban descargas eléctricas para controlar las fantasías sexuales con personas del mismo sexo del paciente.