Google ultima los detalles de su nueva creación: un vehículo que se detiene mientras los peatones cruzan, respeta el semáforo y conduce en medio de un tránsito pesado.
Todo sin conductor tras el volante y sería ideal para el servicio de taxis.
'Las computadoras no se distraen y no conducen ebrias', afirmó Dmitri Dolgov, responsable del proyecto.