Anualmente más de 90 mil niños mueren en el mundo por el cáncer y la causa principal es la falta de prevención. Por ello, es importante que los padres actúen rápidamente ante las dolencias de sus hijos.
En los pequeños, los primeros síntomas se presentan con dolores de cabeza o piernas, moretones, bultos que aparecen en cualquier parte del cuerpo, pérdida de peso inexplicable, palidez, brillo excesivo de los ojos y el sangrado de la nariz, recto o encías.
Los niños que presentan con frecuencia dichas molestias deben ir al médico para ser evaluados, esto permitirá descartar o diagnosticar precozmente alguna enfermedad oncológica, indica la doctora Gloria Paredes, pediatra del Centro Oncológico Detecta.
Según las estadísticas, este mal se ha convertido en la segunda causa de mortalidad en los niños, pero la cifra puede variar si se actúa a tiempo.