Duérmete mi niño

El 30% de recién nacidos presenta trastorno del sueño.
Para garantizar un buen desarrollo físico un bebé debe disfrutar de un adecuado descanso, sobre todo durante la noche, que es cuando su cuerpo produce, en mayor medida, la hormona que estimula su crecimiento. Pero no todos los pequeños tienen la facilidad de conciliar el sueño, según los pediatras hasta el 30% de ellos puede presentar trastornos al dormir.
En la I Conferencia 'La importancia del sueño', organizada por Huggies y la Clínica Hogar de la Madre, el doctor David Huanca, neurólogo pediatra, dijo que los bebés con falta de horas de sueño están sobreexcitados, malhumorados y pueden enfermarse fácilmente, así como presentar problemas de psicomotricidad.
'Un buen sueño contribuye a la maduración del sistema nervioso del bebé y regula el crecimiento armónico de los distintos órganos. Los tips para que un bebé duerma bien se resumen en una buena alimentación (lactancia materna), abrigo adecuado y tener un pañal limpio y seco'.
El sueño se divide en dos periodos: el sueño profundo, que ayuda a la regeneración y restauración orgánica, la conservación de energía, la síntesis de la hormona del crecimiento y estimula el sistema inmunitario; y el sueño superficial, que favorece la maduración neuronal y la regeneración de procesos mentales como fijación de atención, aprendizaje, consolidación y almacenamiento de memoria a largo plazo.