El desarrollo vertiginoso de este rubro envuelve a muchos hasta el punto de volverlos dependientes.
La adicción al tabaco, el alcohol o las drogas destruye la vida de sus consumidores y de quienes los rodean. Esta misma situación se puede percibir en los tecnópatas, personas que usan de manera compulsiva los medios tecnológicos.
Un adicto a la tecnología es aquel que no puede separarse del celular, ya sea para hablar o enviar mensajes de texto; navega en el Internet, está pendiente de su correo electrónico, no puede desconectarse del chat y participa de las redes sociales y los blogs.
Los psicólogos indican que el uso de la tecnología no es malo, su abuso es lo que trae problemas; por ello se debe prestar atención a los signos que alertan esta situación. Si usted constantemente envía mensajes de texto, reemplaza los encuentros personales con sesiones de chat o reduce el tiempo con su familia para estar conectado más horas en Internet, preocúpese, podría ser un adicto.
Pero la adicción no sólo va por el tiempo de uso, también se relaciona con su consumo, es decir, el dependiente siempre buscará tener el último modelo de Iphone, está interesado en los programas más novedosos de la red y continuamente está posteando su cuenta en Twitter o su blog personal.
Si usted se identifica con alguno de estos síntomas, intente reducir el tiempo que pasa sumergido en el mundo tecnológico; si presenta angustia o ansiedad busque ayuda profesional.