Una maternidad saludable

Durante la gestación es importante el consumo de nutrientes esenciales que cubran los requerimientos tanto de la madre como del futuro bebé. El secreto es una dieta con alimentos naturales, frescos e integrales. A continuación algunas sugerencias: -El hierro favorece el desarrollo del bebé y evita la anemia en la gestante. Se encuentra en habas, arvejas, brócoli, nueces, espárragos, espinaca, etc.
-El cloruro de magnesio ayuda a evitar los calambres y fatiga en las piernas, así como la hipertensión durante el embarazo (preeclampsia).
-El ácido fólico como suplemento se recomienda consumirlo mínimo tres meses antes de concebir. En los alimentos se encuentra en vegetales de hojas verdes (acelga, espinaca, brócoli), arroz integral, trigo, legumbres (lentejas, arvejas secas) y frutas (naranja, plátano de la isla).
-La colina, vitamina del complejo B, ayuda a desarrollar los tejidos nerviosos de la memoria en el cerebro del feto y a prevenir defectos de nacimiento. Está en la yema del huevo, ajonjolí, semillas de girasol, soya y germen de trigo.
-Fuentes de calcio son el tofu o queso de soya, leche de cabra, zapallo, camote, pasas, higos secos, quesos, yogur, maíz, etc.
-El zinc fortalece el sistema inmunológico y es importante en la formación de los órganos reproductivos. Lo encuentra en el trigo integral y en las semillas de calabaza.