En las últimas semanas, los peruanos han percibido un cielo nublado y un, haciendo que muchos de ellos decidan por abrigarse más. Y es que los días soleados y de ya quedaron atrás, por lo que es necesario cuidar a los pequeños de casa para prevenir el desarrollo de enfermedades respiratorias, las cuales son muy comunes durante esta temporada de frío.

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Según el, los males más frecuentes durante el cambio de estación son la gripe o influenza, el resfrío común, la faringitis, la bronquitis y la neumonía. Estos afectan principalmente a los niños, adultos mayores y personas con el sistema inmune debilitado.

Por ello, Carlos José Mendoza Fox, especialista en Neumología Pediátrica de la clínica Anglo Americana, brinda algunas recomendaciones para evitar que este cambio en la temperatura tenga un fuerte impacto en los más pequeños de la familia, especialmente en un contexto como el de la del .

Abrigarlos prudentemente

Muchos padres abrigan de forma exagerada a sus hijos al percatarse que tosen o estornudan, pudiendo ser este un acto contraproducente para su salud, ya que un exceso de tela les impide regular su temperatura corporal con la del ambiente y asegurar los mecanismos de transpiración adecuados.

También hay que tener en cuenta el tipo de tejido de las prendas de vestir: la lana, por ejemplo, puede irritar las vías respiratorias, acumular polvo y causar alergias. El material más apropiado para los niños es el algodón.

Ventilar los ambientes frecuentados

Para prevenir ciertas enfermedades, es importante que todos los espacios en los que se desenvuelven los niños estén ventilados, y si es posible poco concurridos. Lo ideal es abrir las ventanas de las habitaciones el mayor tiempo posible, para que circule aire fresco de manera que se evite el acumulo de aéreo alérgenos y virus en el ambiente.

En interiores, es preferible mantener la casa templada y permitir así que el propio organismo utilice sus mecanismos reguladores de adaptación al frío. Así también se evitarán grandes cambios de temperatura cuando se sale del hogar.

Mantener buenos hábitos de higiene

En la medida de lo posible, evitar el contacto de los niños con personas enfermas. Es de suma importancia el lavado de las manos con frecuencia, ya que de esta manera se evita en forma significativa el riesgo de que el niño se autoinfecte al tocar superficies contaminadas con microorganismos como virus respiratorios.

Tener una dieta balanceada

Para evitar las enfermedades respiratorias con el cambio de clima, es importante tener una dieta saludable que incluya frutas y verduras, alimentos ricos en vitamina A y C, además de pescado y lácteos. También se aconseja no darles bebidas heladas y preferir los zumos naturales a temperatura ambiente.

Contar con las vacunas al día

Muchas infecciones respiratorias pueden ser prevenidas al tener completo el esquema de vacunación. Se debe tener en cuenta que la vacunación debe incluir la administración anual contra la influenza, de preferencia antes del inicio del invierno.

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