Encantado con Perú
Encantado con Perú

El actor argentino Pablo Martínez, popular por las series “Casi ángeles” y “Aliados”, hizo un alto a las grabaciones de la serie “El regreso de Lucas” en el cementerio Mapfre de Huachipa, una mega producción de Telefé y América Televisión, y nos contó detalles del proyecto que protagoniza junto al peruano Salvador del Solar y la colombiana Ana María Orozco.

-¿Cómo ha resultado la experiencia de trabajar por primera vez en Perú?

Ya llegando al final, el martes vuelvo a casa. Ha sido una experiencia increíble, transformadora. Es la primera vez que trabajo en otro país. Voy ocho meses grabando la serie.

-¿Cuál es la historia que envuelve a Lucas, el personaje que encarnas en la serie?

A una familia millonaria le secuestran un hijo cuando tiene cuatro o cinco años, después de 20 años llega mi personaje, toca la puerta y dice: ‘Soy Lucas’; ahí se desarrolla toda la trama. En la casa se desarrollan apuros tremendos, él se llega a enamorar de su propia hermana. Es la primera vez que protagonizo algo tan fuerte.

-¿Qué tal la experiencia de compartir escenas con actores peruanos como Diego Bertie, Jason Day y Salvador del Solar?

Hay actores muy buenos, se ha armado algo lindo. Uno tiene que estar a la altura, sobre todo con Salvador, que es muy bueno; me encanta grabar con él, aprendo mucho de mirarlo. Con Ana María (Orozco) nos hicimos reamigos. Son otras escuelas, los colombianos, peruanos, argentinos. Es sumamente rico, aprendí por todos lados.

-¿Qué te pareció Milett Figueroa como actriz?

Bueno la verdad que trabajamos muy poco, pero nos llevamos bárbaro, muy profesional. No sé si tenía tanta experiencia, me contó que algo había hecho, pero con muchas ganas de aprender, bien dispuesta. Siento que tiene una gran veta para explotar. Me contó que iba a grabar la telenovela “Colorina”.

-Eugenia “La China” Suárez y Lali Espósito han alcanzado renombre tras “Casi ángeles”. ¿Que significó para ti esa serie juvenil?

Un viraje de 360° del barco. Trajo cosas pajas: Primero, el contacto con el arte; segundo, el mundo de la television, y tercero, perder el anonimato, que es algo bastante fuerte. “Casi ángeles” fue un cambio radical. Se vio en Israel, en Europa.