La juventud en el alma
La juventud en el alma

Ocho ancianos que conviven en un geriátrico deciden olvidarse de sus penas y dolores físicos, y al ritmo de pegajosos hits de The Rolling Stones, The Police, Nirvana, entre otros grupos de los 80 y 90, cambian su cotidiana vida. Así empieza el musical “Forever Young” (Siempre joven), original de Erik Gedeón y que tras su exitoso paso por Noruega, España y Argentina llega al Perú de la mano de Armando Machuca, actor y director de la obra. “Forever Young” representa un canto a la vida, porque muestra a personas de la tercera edad asumiendo una actitud para enfrentar el paso del tiempo. “La obra hace referencia a la gente que fue adolescente en los 80 y 90, y expone una problemática sobre el cuidado al adulto mayor: cómo se le trata, cómo se convive con él, cuán conscientes somos de que todos envejecemos, con qué actitud debemos enfrentar el paso de los años”, indica Armando. 


“En esta historia, los viejitos no solo se dedican a pensar en lo que fue, sino que encuentran maneras lúdicas de mantenerse siempre joven”, agrega Machuca, quien subraya que la obra rescata el espíritu de las personas antes que la edad. “La vida es una sola, uno debe buscar pasarla bien siempre; la vida es en un solo acto: se abre el telón, actúas y se acabó. Uno puede tener 20 años y tener una vida de viejo amargado; no se refiere a una edad cronológica, sino a una edad de espíritu. La obra por más que la vea un chico de 15 años se va identificar”, añade.


El director indica que al texto original le ha agregado elementos propios, como canciones del rock nacional y el envejecimiento real de los actores. “Diego Bertie es Diego con 80 años, Tati Alcantará igual; hacemos una versión extraña de nosotros mismos en el futuro. Es una sátira, una burla de cómo puede ser la vejez de los actores. Tenemos un bloque de rock peruano, donde escuchamos temas de Pedro Suárez-Vértiz, Río, Arena Hash, Gianmarco, Miki González”, detalla.
Machuca considera este trabajo “el reto más complicado en su carrera artística”, pues al dirigir una producción independiente ha enfrentado problemas para conseguir una sala para desarrollar el musical y conseguir auspicios para la financiación. “Muy poca gente quiere invertir si no hay una cara de la televisión”, finalizó.