Al dolor que siente por la pérdida de quien fue su pareja sentimental, Mery Espinoza, se sumó la inmensa pena de la partida sin retorno de su amigo el Zambo Cavero. Por eso, Melcochita improvisó ayer en el Museo de la Nación un tema muy triste que le salió desde lo más profundo de su corazón.
El Perú se queda triste, todo el mundo te quería, todos estamos llorando. Tú fuiste lo mejor de mi Perú. Antes que me vaya, te pido Dios mío, que te acuerdes del Zambo Cavero, cantó Melcochita con mucho sentimiento y congoja. Esa también fue su forma de descargar tanta tristeza que invade su ser.
He cantado con el alma, no puedo repetirla porque la letra la inventé mientras interpretaba. Lo hice con el corazón al Zambo. El no está muerto, se ha muerto la carne, pero su canto vive y para que el pueblo no lo olvide las radios deben poner cada hora sus canciones.